La hija del piloto, Lissete González, confirmó que su padre murió la noche del jueves durante su reclusión en la prisión del Sistema Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), donde se encontraba preso desde hacía casi un año.
"Lamento confirmar que mi papá murió anoche", dijo la mujer, sin aclarar las circunstancias. La prensa oficialista venezolana dejó trascender que se habría suicidado.
Rodolfo González tenía 63 años y era, desde abril de 2014, parte de los opositores arrestados por el Gobierno tras las protestas que dejaron 43 muertos en febrero de ese año. Entre los detenidos por aquellos sucesos figura el líder antichavista Leopoldo López. En el caso de González, el chavismo lo detuvo por " asociación para delinquir, tenencia de explosivos y tráfico de armas de fuego".
En mayo del año pasado, el ministro de Interior, Miguel Rodríguez Torres, se hizo eco de una de las tantas denuncias de golpe de Estado difundidas por el presidente Nicolás Maduro.
Según el funcionario, Torres era el organizador en Caracas de las guarimbas, las barricadas con que la oposición enfrenta al régimen de Maduro.
"Ese caballero es el articulador logístico de toda esa operación que estaban haciendo en Caracas. ¿Dónde conseguimos eso? En su computadora, de la que todavía, después de dos días, se está bajando información valiosa para la investigación", dijo Torres en ese momento.
Para la oposición, González no era otra cosa que un perseguido político. Elenis Rodriguez, defensora de los derechos humanos e integrante Fundación por los Derechos y Equidad Ciudadana (Fundeci), emitió un comunicado en el que detalla que González, "un venezolano detenido por pensar distinto", habría decidio suicidarse porque no quería ser trasladado a la prisión de Yare, en el estado de Miranda. Distante a unos 80 kilómetros de Caracas, el cambio hubiera complicado la visita de sus familiares.
"Recuerdo que en abril, cuando estábamos en plena audiencia de presentación ante el Tribunal 27 de control, Maduro en cadena nacional dijo que al aviador debían enviarlo a Yare. Nunca olvidaré el rostro de angustia de un hombre inocente, viéndose amenazado de ir a una cárcel de alta peligrosidad, como tampoco olvidaré lo que pensó en voz alta si lo enviaban a Yare", escribió González.
"Ayer, los presos políticos recluidos en el Sebin recibieron la visita de (la ministra de Prisiones) Iris Varela, quien informó que muchos de ellos serian trasladados a Yare. En la lista estaba el ciudadano Rodolfo Gonzalez. Rodolfo se dejó arropar por la angustia e impotencia y presuntamente tomó una lamentable decisión", agregó Rodríguez.